El doctor Francisco Hernández, protomédico del rey en las Indias Occidentales, acudió ante el Tribunal del Santo Oficio de la Nueva España para declarar en el juicio que se le seguía al doctor Pedro López por delito de desacato contra varias imágenes ?entre ellas un crucifijo, a las que, dijo, tenía en un lugar bajo y entre basura?, señalando que conocía al dicho Pedro López de seis meses a esa fecha, y que sobre el asunto sólo sabía lo dicho por un comerciante llamado Agustín Castellanos, quien lo comentó.