Los médicos y catedráticos de la Escuela Nacional de Medicina, Fernando Zárraga, Guillermo Parra y Andrés de Garay, inauguraron el Sanatorio y Casa de Salud, en el domicilio # 45, de la 3ª calle de las Artes, "conforme a todas las reglas de la cirugía moderna y la higiene más severa". El Departamento Quirúrgico llamaba la atención y era digno de ser visitado por los médicos. En cuanto a las recámaras, salones, baños, no sólo eran cómodos sino elegantes y difícilmente podían ser superados. Tenía además la casa hermosos patios, corredores y jardines, lo que la hacía agradable y sana. El aseo, la asepsia y la antisepsia más rigurosa, el orden y la honradez formaban la base en que descansaba este nuevo negocio".