Comienza en Buenos Aires la Epidemia de Fiebre Amarilla. El 27 de enero de 1871 murieron, en Buenos Aires, las tres primeras víctimas de esta enfermedad. En medio de los festejos por los carnavales se intentó ocultar la gravedad de la situación, pero la peste fue avanzando rápidamente mientras la población huía aterrorizada. Como saldo, entre enero y junio de ese año murieron 14.000 personas. Sumados a los que huyeron, los 190.000 habitantes que poblaban el casco urbano se redujeron a 60.000. Un héroe en esos trágicos días fue el Dr. Eduardo Wilde, médico, escritor, testigo y cronista de la peste, quien colaboró activamente en la atención de los enfermos, siendo uno de los pocos que se atrevió a declarar que se trataba de la temible "fiebre amarilla".

Nace en la ciudad de la Paz, el Dr. Alonso Suazo Orellana, eminente clínico e innovador de la Medicina Interna de Honduras.

En Mayajigua, provincia de Las Villas, nace Juan Antiga Escobar. Graduado de doctor en Medicina, en derecho Civil y en Derecho Público. Fue médico homeópata y naturalista.

Comienza a funcionar el Hospital de Caridad de Jovellanos, provincia de Matanzas, en una casa particular que se alquiló con ese fin.

Nace en San Antonio de los Baños, La Habana, Daniel Gispert García, médico y general de las guerras de independencia. Fue Secretario de Sanidad y Beneficencia.

Un informe, elaborado por el gobernador y presidente del Ayuntamiento de la ciudad de México, daba cuenta de que, en el Hospital de San Juan de Dios, "existían ciento dieciséis enfermas, divididas en dos clases: presas y libres, considerando a las primeras como prostitutas remitidas por sección sanitaria, y que permanecían en el Hospital hasta su completa recuperación, como era el caso de las sesenta y dos presas" que había en el Hospital en ese momento.

Fusilamiento de los ocho estudiantes de medicina. Día de luto médico.

El Ayuntamiento de la ciudad de México aprobó el Reglamento para los Hospitales de la Municipalidad de México, que entre otras cosas señalaba: "El número de médicos que habrá en cada hospital será proporcional al número de enfermos y a la clase de trabajos que le están encomendados, según el reglamento especial de cada establecimiento"; que los médicos se distinguirían en encargados de la primera y segunda secciones de cada sala, que la provisión de las plazas se haría por oposición y "habrá en cada hospital un médico director, que será nombrado por todos los profesores del establecimiento, en escrutinio secreto, siendo el acto de la elección presidido por el C. regidor respectivo, y renovándose ésta anualmente".